Punto de partida

Todo tiene un inicio, el de Benbulec comienza con la adopción de una preciosa Pit Bull llamada Huki, hace dos años. Siempre hemos convivido con perros, de todo tipo, y ya éramos conscientes antes de la adopción de Huki, de las dificultades, los prejuicios y la des-información que giran en torno a esta raza y otras similares, pero Huki marcó el cambio.
Huki marcó el cambio por varias razones, entre ellas que llegó en el momento preciso en el que estábamos lo suficiente motivados y éramos lo suficiente maduros para comprender lo que suponía emprender, pero no queríamos emprender un negocio cualquiera, queríamos trascender, y no queríamos trascender de cualquier manera.
Benbulec se creó porque unos seres maravillosos y con mucho que enseñarnos, son perseguidos de forma desmedida a causa de la des-información. Son seres leales, fuertes, sensibles e inteligentes, que deberían inspirar, a los seres humanos, a mejorar y dar lo mejor de sí, en vez de inspirarles temor.
Benbulec se creó porque muchos padecen una gran carencia de conocimientos, lo que lleva a una menor comprensión del mundo y una baja empatía hacia todo lo demás.
Benbulec se creó porque los humanos somos mejores que lo que parecemos ser, pero hay que trabajar para demostrarlo.
Benbulec se creó porque el planeta Tierra y sus habitantes, demandan un cambio, y ese cambio puede llevarse a cabo aprendiendo de otros , que también lo han pasado mal, aprendiendo de su forma de salir adelante cuando se les da la oportunidad, y que nunca abandonan hasta que la oportunidad llega.
Benbulec se creó porque cuando faltan oportunidades y se necesita un cambio, tenemos que salir a buscarlas y llevar a cabo ese cambio, nosotros mismos.